El empujón para nuestro estado de ánimo
El empujón definitivo para nuestro estado de ánimo
Siempre nos dicen, “hacer deporte es bueno para la salud física y psicoemocional”.
Se suele recomendar que si estas “agobiado” o no te encuentras bien emocionalmente hagas deporte, pero ¿realmente sabemos por qué mejora nuestro estado de ánimo?
El estado de ánimo a examen
El estado de ánimo es un estado emocional general e indeterminado de la personalidad, que influencia los procesos cognoscitivos y la conducta respecto al medio y a sí mismo; es variable y en él coexisten vivencias de diferente denominación, connotación e intensidad. Se vincula fundamentalmente a la posición subjetiva del individuo respecto a vivencias provenientes de la actividad vital del organismo, sus relaciones con el medio y la satisfacción de sus necesidades y aspiraciones.
En resumen, todo influye sobre el estado de ánimo y el estado de ánimo influye en todo.
La actividad física como revulsivo del estado de ánimo
La actividad deportiva, influye en el estado de ánimo debido a la demanda esencial de la actividad física que es el aumento de la actividad muscular. Si los requisitos planteados en el entrenamiento son adaptables a la capacidad del sujeto, provocan sentimientos de alegría u optimismo debido a la consecución de los objetivos. Además, aumenta la sensación de seguridad en uno mismo creciendo por ende la motivación y autoestima a través de la mejora del autoconcepto y de la modificación de la imagen corporal.
La explicación fisiológica. Somos química.
Durante la realización ejercicio físico, el organismo segrega endorfinas que se encargan de conectar las neuronas del sistema nervioso y se convierte en la unión entre el cuerpo y la mente, siendo transmisoras de placer, felicidad…, y contribuyendo a paliar el dolor. Las investigaciones confirman que el ejercicio tiene un efecto ansiolítico, tranquilizante (Salmon, 2001; Nakao, 2001; O’Connor, 2000; Dishman, 1995; Biddle, 1991), producido por un efecto agudo (una sesión de ejercicio) o crónico (participación durante 8-12 semanas); asociándose también con un efecto antidepresivo de magnitud moderada (Suh, 2002; Manber, 2002; Salmon, 2001; O’Neal, 2000) aumentando la inyección sanguínea en regiones cerebrales destinadas a la regulación de las emociones, respuesta al estrés e influencia de neurotransmisores como la dopamina, norepinefrina y serotonina.
Por tanto, este aumento de neurotransmisores, hace que vivamos sensaciones y emociones positivas, y reduzcamos el impacto de las negativas.
El realizar una actividad deportiva de forma periódica y estable en el tiempo hará que “subamos un escalón” en nuestras emociones acercándonos hacia las más positivas y creando por tanto un circuito que nos ayudará a positivizar nuestro estado de ánimo, y por tanto, a sentirnos más felices.
Por lo tanto si lo que buscas es la fórmula de la felicidad, Felicidad= D x T.(Felicidad = Deporte)